
Salir con un recién nacido de forma segura es un paso importante que también puede presentar algunos retos.
Los asientos de bebé para el coche pueden ser difíciles de instalar: caben en los coches de diferentes maneras y pueden ser complicados. La mayoría de los departamentos de bomberos en las comunidades revisan los asientos para automóviles, para garantizar que estén instalados correctamente. También hay buenos vídeos en línea para guiarte a través de asientos de coche para tu bebé y tus otros niños. Buscar ayuda mucho antes de la llegada del bebé es un buen plan. ¿No lo has hecho? No te preocupes, pero definitivamente sigue las instrucciones y pide consejo cuando necesites instalarlo bien.
A algunas mujeres les resulta incómodo usar el cinturón de seguridad después de una cesárea y a menudo se les dice que no conduzcan un auto durante varias semanas. Esto puede ser más fácil decirlo que hacerlo para una mamá ocupada. Se sugiere que las madres sean capaces de girar en todas las direcciones para poder ver los otros coches a su alrededor antes de tomar el volante. Si estás tomando analgésicos recetados no es seguro conducir un coche.
Dormir o la falta de sueño es definitivamente un tema para el cuarto trimestre. Conducir mientras estás cansada se ha comparado con conducir mientras tomas alcohol. Pídele a otra persona que conduzca tu auto si sabes que estás realmente cansada. Tratamos de hacerlo todo, pero este es un momento en el que pedir ayuda podría salvar vidas.
Tener un bebé llorando en el asiento trasero también puede ser una distracción. Cuando conduzcas sola con el bebé considera agregar un espejo en el asiento trasero para que puedas mirar hacia atrás y ver la cara de tu bebé rápida y fácilmente. Si el bebé está llorando y necesita ser alimentado o cargarlo, siempre es mejor detenerse en algún lugar seguro para atenderlo.
Hay información muy limitada sobre viajar con bebés. “La señora del asiento del coche” (thecarseatlady.com) tiene información útil sobre cómo llevar a un bebé en el transporte públicos como los autobuses* y en el metro y los trenes.* (*en inglés). Los vehículos de tránsito no tienen cinturones de seguridad ni anclajes para asegurar un asiento para el coche, por lo que usar un portabebés es probablemente la mejor opción. Algunos vehículos de transportación pública tienen espacio para un cochecito, pero algunas agencias podrían requerir que el mismo se doble y se guarde. Las personas preocupadas por llevar a un bebé en transporte público deben recordar que es menos probable que tengan un accidente en un vehículo de transportación pública que un vehículo de pasajeros.
Las políticas en torno al transporte en “vans” (furgonetas) como las que apoya Medicaid y/o el Departamento de Servicios Sociales pueden no estar claras. Es importante preguntar, ya que algunas de ellas no permiten que las mujeres viajen con sus hijos pequeños, ni siquiera en asientos para el coche, para asistir a las citas.