
La incontinencia urinaria es cuando tienes escapes de orina involuntariamente. Hay diferentes tipos de incontinencia urinaria, pero la que muchas mujeres experimentan después de dar a luz es “incontinencia urinaria por estrés”. Estos escapes de orina pueden ocurrir cuando estornudas, ríes o saltas, o en cualquier momento. Para muchas mujeres, la incontinencia urinaria se resuelve por sí sola durante los primeros meses tras el parto. Sin embargo, se estima que entre el 11% y el 23% de las mujeres siguen experimentando incontinencia urinaria durante un período de tiempo más largo. Para algunas mujeres, ciertas actividades de alto impacto como saltar pueden provocar la necesidad de orinar durante muchos años, ¡un distintivo de la maternidad!
Los factores de riesgo para la incontinencia urinaria incluyen estar/haber estado embarazada, ser mayor, parto vaginal, una segunda etapa más larga del trabajo de parto (empujar), mayor peso, el tamaño del bebé durante el embarazo, los antecedentes familiares e incontinencia urinaria previa.
Las cosas que podrían ayudar:
- Sé amable contigo misma y con tu cuerpo. ¡La incontinencia urinaria es común!
- La incontinencia urinaria es un síntoma de músculos debilitados y/o que se han estirado en exceso. Los Kegels son ejercicios que puedes hacer para ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico por tu cuenta (pero quieres asegurarte de que los estás haciendo correctamente).
- Usa almohadillas o ropa interior a prueba de escapes y ve al baño siempre que sea necesario.
- Habla con tu proveedor de cuidado de salud. Consúltale sobre la salud del suelo pélvico y tus sentimientos como parte de tu cuidado posparto y continúa monitoreando y explorando tratamientos.
- Si experimentas dolor al orinar, si notas un mal olor, o tienes que orinar mucho, habla con tu proveedor. Las infecciones del tracto urinario también son comunes durante esta etapa.
- La fisioterapia y/o la terapia ocupacional con ejercicios para los músculos del suelo pélvico y/o el entrenamiento de biorretroalimentación pueden ayudar a algunas mujeres con la incontinencia urinaria persistente tras el parto.
- Explora tus opciones. No tengas miedo de decirle a tu proveedor o buscar atención médica. Aunque la incontinencia urinaria posparto es común, no tiene que ser permanente. Se puede tratar, y superarla puede ser importante para tu sentido de identidad.
Si la incontinencia urinaria persiste y te gustaría considerar un tratamiento avanzado, pide una referencia o referido para uroginecología: estos proveedores médicos son especialistas en el suelo pélvico femenino que apoyan a las mujeres que atraviesan por estos problemas a diario.
Recursos que puedes explorar: