
Comer bien se trata de la nutrición. Para muchas mujeres en el cuarto trimestre y en el futuro les resulta difícil tener el tiempo o el apoyo práctico para comer como les gustaría. Los patrones de sueño y tu estado de ánimo también se afectan cuando tienes hambre y cuando te sientes llena.
Hay algunos alimentos que pueden ayudarte a sentirte bien y otros que si se comen en grandes cantidades pueden causar problemas. Abastecer tu cocina y otros lugares que frecuentas en el período posparto con alimentos nutritivos, fáciles de preparar, puede hacer que sea más sencillo tener opciones saludables. Si tus amigos o familiares ofrecen llevarte alimentos o una comida, pídeles frutas y verduras cortadas o alimentos que sean pequeños, como manzanas o zanahorias. Los cereales integrales listos para comer o galletas, nueces, huevos, queso y mantequilla de maní son algunas otras opciones que son fáciles de comer con una sola mano. Asegúrate de que estás recibiendo mucha proteína, y no solo estás comiendo carbohidratos. Puedes tener una jarra o una taza grande junto a tu cama o junto a tu silla favorita para que puedas tomar mucha agua durante todo el día.
Muchas mujeres dejan de tomar vitaminas prenatales después de tener un bebé. Sin embargo, puedes continuar con las vitaminas prenatales o cambiar a una multivitamina diaria, incluyendo las masticables o tabletas pequeñas. Hay muchos nutrientes en las vitaminas que podrían beneficiarte ahora.
Recursos adicionales para explorar (*en inglés):
- Mi Plato de USDA y Consejos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU.
- La Cruz Blanca: Alimentación en el Post Parto
- La Fundación Preeclampsia tiene una excelente guía sobre alimentación saludable – echa un vistazo aquí (en inglés).